Textos en español

Que las preguntas no se callen

       Si preguntar algo no es una afronta, ¿por qué somos tímidos cuándo preguntamos? La timidez es responsable, quizá, culpable cuando no preguntamos. Si sentimos vergüenza cuando no comprendemos algo es que la vanidad es mayor que nuestra ignorancia. Si el sabio griego fue sabio porque no conocía nada, eso no aconteció por no preguntar, lo que no le impidió escribir su filosofía.
        Desistimos de muchas cosas porque tenemos vergüenza de preguntar. La falta de preguntas nos impide pensar, por ello juzgamos a otros a partir de nuestros pensamientos, nuestras convicciones, con respuestas listas que salieron de nuestros prejuicios. Cuando juzgamos antes de oír al otro, este es el camino más tranquilo para no preguntar y no necesitar responder a nadie.
        Si estamos en la calle y miramos a una joven con un niño en su regazo, pidiendo limosnas, nuestro primer pensamiento es juzgarla. Y si le preguntamos por qué está en la calle, ella responderá con sus razones, y, envuelto por prejuicios, también, oiremos sus razones bajo la comprensión que tenemos en nuestro script interior.
       Preguntar borra nuestras dudas, nos da rumbos. Por ejemplo, si intercambiamos miradas amorosas y llenas de esperanza con alguien, imaginamos estrategias parar acercarnos a nuestro objecto de deseo. Si no le preguntamos nunca conoceremos su respuesta sobre nosotros y quizá perderemos el amor de nuestra vida. Al aventurero resta la posibilidad de oír una respuesta negativa, y, para él, solamente existen dos posibilidades: sentirse ofendido y responder de forma dura, propia de los prepotentes y cerrar una puerta definitivamente o, de manera elegante pedir excusas y transformar esa posibilidad en un resultado concreto. Al final de todo, en una segunda posibilidad, ¿cuál enamorado tendría mejores posibilidades?
          Preguntar es para los fuertes, los curiosos, los conquistadores. No hacer preguntas es para los soñadores, los tímidos, los retraídos, que guardan la pregunta y la duda en sus adentros. Los conquistadores se preguntan sobre la posibilidad de intentar hacer algo para alcanzar su objetivo. Si la imaginación es capaz de construir mundos, a los aventureros resta preguntarse qué les falta para alcanzar el objetivo. Si la mente imaginó, la estrategia es encontrar los caminos hacia el fin aguardado, alcanzándolo con preguntas.
         Cuando preguntamos y reflexionamos sobre todo, construimos historias maravillosas sobre nosotros. Proyectos sobre el futuro es una manera de preguntar al universo si somos capaces. La pregunta puede ser clara para algunos y puede ser una ironía para otros. Preguntar nos es ofensa, pero algunas preguntas pueden ofender, herir, cuestionar a otros, y ser, también, banderas de la libertad, cuando enfrentamos al opresor.
        Para comprender el misterio de la vida, tenemos dos preguntas fundamentales sobre nuestra humanidad: ¿De dónde venimos y hacia dónde vamos?

Fuente de la foto: Photo by Kristina Flour on Unsplash 

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Nilson Lattari

Nilson Lattari é carioca, escritor, graduado em Literatura pela Universidade do Estado do Rio de Janeiro, e com especialização em Estudos Literários pela Universidade Federal de Juiz de Fora. Gosta de escrever, principalmente, crônicas e artigos sobre comportamentos humanos, políticos ou sociais. É detentor de vários prêmios em Literatura

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