¿Qué estás pensando?

19/02/2024 Nilson Lattari

Cruzando una calle, yo vi en el muro adelante la siguiente frase: ¿Qué estás pensando? Claro que la pregunta no fue original porque ella aparece en el Facebook. Aquella pregunta que bulle con la gente animándonos a escribir algo.
Me quedé allí el que pensaba el sujeto que escribió aquella frase del Face en un muro de una calle. Era un burlón o un nuevo esteta del mundo virtual convirtiendo al mundo real la frase que nos mantiene conectados en la rede social.
Sin embargo, ¿Qué estás pensando ahorita? ¿Que voy a escribir acerca del que tú estás pensando? ¿No es así? Errado. Yo no estoy pensando absolutamente nada hasta porque no puedo escribir todo el que yo mismo estoy pensando en la hora que veo la frase: ¿Qué estás pensando?
Si decimos, a todo momento, el que estamos pensando, el Face o alguien que maneja el sistema van a nos ofrecer una varita de condón como un regalo hasta las… ropas íntimas de una celebridad.
Y está allí la pregunta en el mundo real, desafiando a los peatones que busquen en sus cerebros el que están pensando. El malhechor que va a robar a alguien podría hacer la pregunta: ¿Qué estás pensando? Podría ser una nueva manera de pensar, el que estaba pensando, en sacar a alguien un bien. O, entonces, alguien que pasa al lado de una mujer o la mujer que pasa al lado de un hombre: ¿Qué estarán pensando? No es necesario esforzarse para imaginar,o, simplemente, estarán pensando en sus problemas personales.
Y si tuviéramos subtítulos arriba de nuestras cabezas como en las películas, nadie, por supuesto, estaría pensando en alguna cosa. Y teníamos muchos intentando leer los pensamientos de los demás.
Bueno, esa pregunta, en realidad, estimula nuestra creatividad, pues estamos envueltos en nuestros problemas, en nuestras alegrías y tristezas, y podríamos pensar: ¿Qué estoy pensando para poder solucionar los problemas míos?
El mundo virtual es fantástico, aunque no exista físicamente, y en él podemos rechazar al menos una cantidad de personas aburridas, a partir del concepto de cada uno, y tendríamos un mundo en donde solo existirían los amigos. El universo girarían alrededor de personas a quiénes podríamos decir el que estamos pensando. Ellas nos conocen.
– Sí, claro, aquel chico es así mismo, él dice lo que piensa y nosotros sabemos el que piensa, incluso lo que come. El chico es así mismo, siempre pensando alguna cosa.
Me imagino que tú, lector, estará pensando sobre lo que yo pensaba cuando escribí este texto.