Nuestros esfuerzos
En la vida, todo lo que conquistamos, honestamente, fue con gran esfuerzo. Por supuesto que muchos lograron objetivos usando caminos poco comunes o aceptables. Así, en el mundo, existen los listos y los experts que intentan obtener la mayor cantidad posible de recursos e influencia. Por eso, es mejor ver con inteligencia al futuro y encontrar una salida en donde nadie ha visto antes.
Entretanto, cuando una idea surge en nuestra mente, en realidad ella resulta de una ola de acontecimientos que están apareciendo. Ella nace bajo una atmósfera en donde alguna idea vive en el aire y vuela tonta de alegría de encontrar a su pareja: el genio que va a descifrarla.
Sin embargo, las grandes ideas y también las pequeñas necesitan de una dosis de esfuerzo. Necesitan de una dosis de talento y necesitan de una dosis de honestidad. Nada es más honesto que reconocer el esfuerzo del otro, y nada más honesto que reconocer nuestra incapacidad de hacer lo mismo.
Algunos viven del esfuerzo del otro y no reconocen en ellos mismos su incapacidad.
Es imaginar la gran idea, la inspiración, y que es necesario expresar más allá de la realidad, a través de la comprensión de toda historia a su alrededor. Utilizando los esfuerzos de muchos que lograron embaucar la adversidad y enfrentar el futuro.
No es bastante solamente soñar porque la acción de concretar un sueño es particular y se convierte en colectivo cuando compartimos con todos, con buena voluntad de construir un mundo mejor.
El mundo es enemigo de las grandes conquistas. Porque las grandes conquistas nacieron de la incredulidad de algunos. Es gran el esfuerzo de demostrar a algunos que los caminos que siguen los llevarán hacia un abismo. Es más fácil ignorar la realidad y cumplir sus propios deseos que esforzarse para reconstruirse, rehacerse y convertirse en el mejor.
Ese es el gran dilema del esfuerzo y además de la voluntad de alcanzar y lograr objetivos. Colocar nuestros objetivos en línea con el futuro es rechazar viejas ideas y puntos de vista distantes de la realidad. Nadie ha visto su esfuerzo galardonado si no hubiera abierto su mente al mundo y a nuevas posibilidades como hicieron grandes figuras de la historia.
El esfuerzo es la mezcla del trabajo duro y ver el mundo libre de las cuerdas que nos arrestan. Y también es el temor de cambiar nuestros hábitos, conceptos y opiniones.
Es necesario, por lo tanto, cambiar a nosotros mismos si vemos el mundo desde una mirada disgustada.
Aunque una sociedad cambie a causa de la fuerza de la mayoría, existirá una minoría rabiosa que intentará volver y revivir el pasado. Muchos de esa minoría que dicen cosas sobre el esfuerzo, en realidad son los listos que intentan controlar a otros. Si tienen éxito pueden decir que sus vidas afortunadas y oportunidades vinieron de sus esfuerzos. Y venden sus supuestas astucias como expertise. Y los que se quedan atrás imaginan rechazar el esfuerzo real a cambio de una expertise sin tener la suerte de una cuna de oro y de las oportunidades listas para satisfacerlos.
Origen de la foto: Foto de Clique Images na Unsplash
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